Cäcilie M.
Cäcilie M. ( Anna von Lieben, nacida Anna von Tedesco; 1847–1900) es el seudónimo de uno de los primeros pacientes de Freud, a quien llamó en 1890 su «cliente principal» y en 1897 su «instructora».
La vida
Nacida en una rica familia judía austriaca, Anna von Lieben fue derivada a Freud a fines de los años ochenta para recibir ayuda con una serie de trastornos nerviosos de larga data. Después de referirla para una consulta con Charcot, Freud la trató (con cierto éxito a corto plazo) a través del hipnotismo, llevándola con él a ver a Hippolyte Bernheim en 1889 con la esperanza (infructuosa) de que pudiera lograr una cura permanente.
También usó abreacción para el alivio temporal de sus síntomas, señalando sin embargo que su sentimiento de culpa y auto-reproches regresaría rápidamente después de las sesiones de tratamiento.
Sus síntomas, incluidas las alucinaciones y los espasmos físicos, proporcionaron la base de muchas de las afirmaciones de Freud sobre la histeria de conversión; y cómo interpretar desde el síntoma físico o la alucinación hasta el significado emocional subyacente (simbólico) que expresó, a menudo mediante una lógica de «castigo«.
Crítica
Los críticos posteriores de Freud han argumentado que su tratamiento continuo de Anna, dada la conciencia de su incurabilidad, equivalía a usarla como una especie de vaca de efectivo.